Ser "buena"

El otro día, después de atender a una paciente, me quedé con un idea en la cabeza. La posición en que se encuentra la mujer hoy en día a nivel social es sumamente demandante: las mujeres tienen que ser buenas madres, buenas profesionales, buenas mujeres, buenas amas de casa, estar buenas, etc.

Esto lo vemos en las propagandas y en la vida del día a día. Es como que si ser mujer tuviera que ser sinónimo de "buena". Esto no es menor ya que responder a tanta demanda externa genera cansancio, estrés, dolores en el cuerpo como jaquecas, dolor de espalda, no poder ir al baño, artritis, peso en los hombros, pena, rabia, etc. (podría seguir describiendo más).

Tenemos tan metida esa idea que si una mujer falla en alguna de estas cosas le viene enseguida la culpa, el autoreproche, que "no solo buena madre", "no me la puedo con estudiar y ser madre al mismo tiempo" o "no puedo salir porque tengo que…" (estar en el trabajo, con los hijos, con la familia, etc). Las responsabilidades por lo general son tomadas por las mujeres, y los hombres nos desentendemos, ayudando a hacerles la mochila más pesada.

En relación a esto pensaba que con todo esto son pocas las que se dan el espacio para estar consigo mismas, y muchas veces el poder destinar un tiempo para ellas mismas es fundamental.

Muchas siguen haciendo todas sus responsabilidades sin darse el espacio donde puedan pensar en otras cosas, desahogarse, o simplemente hacer algo que les gusta. "Si no hago estas cosas me estreso". Lo he visto en varios casos donde el malestar radica en la gran cantidad de responsabilidades que tienen sobre sus hombros, y muchas veces el cansancio y el estrés les gana.

Pensemos que es como un circulo vicioso: estás cansada por las muchas actividades o responsabilidades que tienes que atender, y por otro lado el cansancio te gana y no te salen bien las cosas, pero como tienes que ser perfecta y hacer todo "bien" te viene el estrés. ¡Ufff!, ¡después del estrés ya nada puede salir mejor! Y cuando haces las cosas mal comienzas a cuestionarte a ti misma, y terminas con la culpa por no ser "buena".

Entre medio hay que sumarle la cantidad de síntomas físicos que van apareciendo en relación al estrés emocional. En el día de hoy por suerte cada vez más mujeres están haciendo lo que les gusta y los hombres nos hacemos cargo de varios temas que hace un par de años atrás no hacíamos. Podemos ver que más mujeres hacen yoga, o actividades fuera del trabajo. Esto ayuda mucho a poder distenderse y hacer otras cosas que no sean responsabilidades.

Soy un convencido de que las mujeres (y hombres) que hacen actividades que les apasionan tanto en el trabajo o fuera de éste son personas más felices. Muchas podrían decirme "Sí, pero no tengo tiempo para hacer esas cosas". Bueno, eso responde a lo que comentaba al principio: es muy difícil salir de esta concepción de "ser buena" y hacerlas todas. Es normal que cueste salir de la zona de confort, pero hacerlo muchas veces trae aprendizajes muy buenos.

Nos invito a todas y todos a poder seguir con nuestras vidas de forma más tranquila y feliz dándonos espacios. Espacios para pensar, entretenerse, hablar, disfrutar y compartir.

Psicólogo Sebastián Bustos.

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